El mercado empieza a poner en precio la mayor incertidumbre derivada de estas decisiones. Las Bolsas cerraban el 3 de marzo la peor sesión en lo que va de año, aunque las caídas se mantienen dentro del patrón visto en 2018 (primer mandato de Trump) en el que el mayor retroceso desde máximos fue de hasta el -10%.
Todo el mundo está a la espera de ver si los nuevos aranceles de Trump entrarán efectivamente en vigor el martes 4 de marzo, mientras que también se preparan para el alcance de la respuesta china.
"A pesar de tener un papel protagonista en el mercado de las materias primas, el hecho de carecer de capacidad para satisfacer su propia demanda y depender de las importaciones de otros países supone un importante foco de riesgo para China", subraya un análisis de Beatriz Villafranca, de CaixaBank Research.
Los expertos del Deutsche Bank destacan "las impresionantes actividades de consumo y gasto en turismo, ventas minoristas y taquillas" durante los 8 días de vacaciones por el Año Nuevo Chino.
Lazard vaticina que el Banco Central Europeo (BCE) baje los tipos hasta el 1,5% si se recrudece la guerra comercial con Estados Unidos.
El crecimiento económico de China se ralentizará hasta el 4,4% en 2025 y el 4,1% en 2026 debido al menor crecimiento esperado de las exportaciones.
Este signo del Zodiaco no es bueno para la Bolsa y bajo él se produjo el crac de 1929, pero Eurizon y DWS ven un escenario optimista pese a los aranceles de Trump.
Acusa a la Unión Europea de "tratar muy, muy injustamente» a EEUU y, además, de una carga fiscal elevada sobre las tecnológicas norteamericanas.
"Los inversores enfrentan una elección entre riesgo y oportunidad en Asia versus EE.UU., y, históricamente, han favorecido lo último", explica John Woods, CIO Asia de Lombard Odier.
Crédito y Caución avisa que el 42% de las empresas chinas sufre problemas de liquidez ante el retraso en el cobro de las facturas.
La ralentización del crecimiento chino provocará un aumento del 23% de las insolvencias en Asia-Pacífico.