07 Nov
07Nov

Un año después de la DANA y otras catástrofes vividas, WeGrant elabora el informe "Ayudas post-catástrofe: qué falla y cómo solucionarlo". La fintech española especializada en simplificar el acceso a fondos públicos detecta grandes fallos del sistema actual, por lo que "es evidente que hace falta innovar en la gestión de ayudas para que, ante futuras catástrofes, las promesas se conviertan en realidad rápida y fácilmente".

Como solución diseñada para simplificar y agilizar todo el ciclo de las ayudas públicas, desde la difusión hasta la tramitación, propone una solución integral basada en digitalización, IA y asistencia experta que responde directamente a cada uno de los fallos del sistema.

La fintech ha desarrollado soluciones para bancos como Santander, Sabadell, BNP Paribas o PKOCon más de 60.000 clientes, su modelo de integración del ecosistema de la ayudas públicas con entidades financieras permite ofrecer a sus clientes anticipos, co-financiación, garantías y avales, lo que facilita la ejecución de los proyectos. Uno de los principales activos de la empresa es su algoritmo de asignación de ayudas: cualquier empresa, sin tener conocimientos previos del mundo de las financiación pública, puede hacer una simulación de las ayudas que puede conseguir en función de su sector, tamaño e inversiones.

Los desastres naturales ponen a prueba tanto la capacidad de respuesta de las instituciones como la resiliencia de las comunidades afectadas. La experiencia acumulada en España muestra que la eficacia del sistema de ayudas no depende únicamente de los recursos comprometidos, sino de la agilidad, la coordinación y la transparencia en su ejecución. Los casos de Lorca, La Palma o la DANA de 2024 evidencian que la fragmentación administrativa, la falta de interoperabilidad entre niveles de gobierno, la escasa información disponible para los afectados y la elevada carga burocrática siguen siendo los principales factores que explican los retrasos, la baja ejecución y la percepción de ineficiencia del sistema. A ello se suma la ausencia de una ventanilla única digital que simplifique la tramitación y centralice la información, lo que obliga a los ciudadanos a gestionar múltiples solicitudes y canales de comunicación con diferentes administraciones.

A escala europea, las pérdidas económicas provocadas por fenómenos meteorológicos y climáticos extremos ascendieron a 738.000 millones€ entre 1980 y 2023. Más del 22% de estas pérdidas se registraron solo entre 2021 y 2023, lo que refleja un aumento acelerado de los impactos climáticos. En 2025, los desastres naturales provocaron pérdidas estimadas en al menos 43.000 millones en la Unión Europea, una cifra que mantiene los niveles récord alcanzados en los últimos años y confirma la tendencia al alza. Los expertos advierten que, de continuar este ritmo, las pérdidas anuales podrían superar los 126.000 millones hacia 2029.

Estos datos evidencian que la vulnerabilidad climática de Europa y en especial de España por su exposición geográfica, requiere una gestión pública más ágil, coordinada y digitalizada para hacer frente a los nuevos desafíos.

La adopción de soluciones tecnológicas y modelos de gestión integrados representa un paso decisivo para revertir las ineficiencias estructurales del sistema de ayudas post-catástrofe. Herramientas digitales aplicadas a la gestión de fondos públicos facilitan el acceso centralizado a la información, automatizan los procesos de solicitud y seguimiento y garantizan trazabilidad y transparencia en cada fase de la tramitación. Este enfoque optimiza la asignación de recursos, minimiza errores humanos y acelera los tiempos de respuesta. 

En un contexto en el que la confianza institucional depende cada vez más de la eficacia y la transparencia, la integración tecnológica se convierte en un elemento esencial para una gestión pública moderna, accesible y orientada a resultados.

El incremento previsto de los fenómenos climáticos extremos exige repensar las políticas públicas desde una perspectiva preventiva y adaptativa. Avanzar hacia un sistema de ayudas post-catástrofe más eficiente y resiliente requerirá fortalecer la coordinación interadministrativa, implantar una ventanilla única digital interoperable que simplifique la experiencia del ciudadano y consolidar una cultura institucional orientada a la anticipación, la transparencia y la evaluación de resultados. 

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.