El asalto a la Fed puede acelerar el proceso de bajadas de tipos en la Reserva Federal, pero también el trasvase de inversión desde los activos norteamericanos a los europeos.
Ebury avisa: asegura que “los mercados están lejos de situarse fuera de peligro todavía, y los inversores no deben perder de vista el hecho de que un retraso en los aranceles no equivale a una eliminación de las restricciones”.