Para el cuarto trimestre de 2025, las entidades financieras encuestadas prevén que los criterios de concesión de préstamos se endurezcan ligeramente en el segmento de financiación a empresas, y se mantengan estables en los de crédito a hogares. En cuanto a la demanda, los bancos anticipan que no variará en empresas, mientas que las solicitudes provenientes de hogares seguirán aumentando, según la Encuesta de Préstamos Bancarios del Banco de España.
Los aranceles de Trump tienen un impacto muy limitado en el crédito a empresas, aunque los bancos reconocen que están realizando un seguimiento mayor a los sectores y empresas que pudieran verse más afectados (compañías exportadoras y con actividad comercial con EEUU. No prevén tampoco un impacto significativo en los próximos meses.
Las condiciones de acceso seguirán mejorando moderadamente en los mercados minoristas y se mantendrán estables en los mayoristas.
Para el cuarto trimestre, se prevé que los indicadores de calidad crediticia favorezcan un ligero endurecimiento de las condiciones, que afectaría a los tres segmentos (adquisición de vivienda, consumo, y empresas), y sería debido al aumento de costes relacionados con el nivel de capital y con operaciones de saneamiento y al cumplimiento de requisitos regulatorios.
Para los próximos seis meses, las entidades financieras esperan que las decisiones sobre los tipos de interés oficiales propicien también una caída de la rentabilidad, aunque más moderada, provocada por unos márgenes unitarios más reducidos, y a pesar del impacto positivo sobre el volumen de crédito concedido.
Balance del tercer trimestre
Los resultados de la Encuesta de Préstamos Bancarios revelan que, en el tercer trimestre de 2025, los criterios de concesión de préstamos a hogares y a empresas se mantuvieron sin variaciones, tal y como las entidades anticipaban hace tres meses. Por su parte, las condiciones generales aplicadas a los nuevos créditos se habrían relajado de forma moderada en todos los segmentos.
Dentro de la financiación a empresas, la relajación habría sido algo mayor en la concedida a las grandes empresas que a las pymes. La relajación se habría materializado en descensos de los tipos de interés aplicados y en un estrechamiento de los márgenes de los préstamos ordinarios, y habría sido propiciado por una mejoría de los costes de financiación de las entidades y de su situación de liquidez, por la presión de la competencia y, en menor medida, por una disminución de los riesgos percibidos.
En cuanto al resto de condiciones, las entidades señalaron que se habría producido un ligero aumento de la cuantía de los préstamos concedidos, en el segmento de empresas de mayor tamaño. El porcentaje de solicitudes de crédito rechazadas habría aumentado ligeramente en los préstamos a hogares para adquisición de vivienda y en los concedidos para consumo y otros fines, manteniéndose estable en el de financiación a empresas.
La demanda de crédito de los hogares y las empresas aumentó en el tercer trimestre de 2025, especialmente en el segmento de préstamos para adquisición de vivienda. En los segmentos de empresas y crédito al consumo y otros fines, el aumento en la demanda supone retomar su senda de crecimiento, después de que se mantuviera estable en el segundo trimestre de 2025. En la financiación a empresas, el aumento de las solicitudes se produjo en el segmento de pymes, ya que en el de grandes compañías no se registraron variaciones significativas.
El comportamiento de la demanda es más positivo de lo que anticipaban los bancos en la ronda anterior de esta encuesta, ya que esperaban que las solicitudes de hogares se mantuvieran estables y que las provenientes de empresas cayeran ligeramente. En cuanto a los factores que explican el crecimiento de la demanda, las entidades financieras señalaron el nivel más reducido de los tipos de interés como factor explicativo en todos los segmentos. Además, en el de financiación a empresas, la demanda se habría visto también impulsada por la existencia de operaciones de reorganización y reestructuración, mientras que la mayor utilización de fondos propios y la emisión de valores (en este caso afectando solo a las grandes empresas) habrían propiciado una reducción de las solicitudes.
En hogares, el aumento de la demanda se habría visto también favorecido por la mayor confianza de los consumidores, por las buenas expectativas del mercado de la vivienda (en el segmento de préstamos para adquisición de vivienda) y por un mayor gasto en bienes de consumo duradero (en los créditos para consumo y otros fines).
Durante el tercer trimestre de 2025 las condiciones de acceso a los mercados de financiación, tanto minoristas como mayoristas, mejoraron ligeramente, salvo en el de titulizaciones, donde no se apreciaron cambios significativos.
Los bancos declararon que la evolución de los indicadores de calidad crediticia durante el tercer trimestre de 2025 no habría tenido ningún impacto sobre su política crediticia.
Los bancos destacaron que la gestión por parte del BCE de la cartera de activos mantenida con fines de política monetaria habría propiciado, durante los últimos seis meses, un aumento moderado de los activos y de la liquidez de las entidades, y habría tenido un ligero impacto positivo sobre sus condiciones de financiación y su rentabilidad. Además, declararon que dicha gestión no habría tenido ninguna influencia sobre su política crediticia.
Las decisiones adoptadas por el BCE sobre los tipos de interés oficiales habrían propiciado, en los últimos seis meses, una disminución de la rentabilidad de las entidades financieras españolas, debido al descenso de los ingresos netos por intereses asociado al estrechamiento de los márgenes unitarios, aun cuando se habría registrado un ligero impacto positivo sobre el volumen de crédito concedido. Además, estas decisiones también habrían favorecido un ligero incremento de otros ingresos distintos a los intereses, vinculados a ganancias de capital.