Miguel Ángel Valero
La división existente en la Reserva Federal tras los asaltos de Trump, como publicó Dinero Seguro, provoca que su presidente, Jerome Powell, extreme la cautela y avise que la la bajada de tipos que prácticamente todo el mundo espera para diciembre no está garantizada. Además, la escasez de datos por el cierre de la Administración en EEUU (camino de su segundo mes) incrementa la incertidumbre sobre la evolución del empleo, que preocupa más que la inflación.
Pese a esa división dentro de la Fed, finalmente pondrá fin a su proceso de reducción de balance a partir del 1 de diciembre. Hasta ahora, se permitía el vencimiento de 40.000 millones$ mensuales —35.000 millones en MBS (bonos hipotecarios) y 5.000 millones en bonos del Tesoro—. En el nuevo esquema, todo lo que vence se renueva, aunque se mantiene el proceso de salida de los bonos hipotecarios. Para ello, se seguirán dejando vencer 35.000 millones de dólares en MBS, pero los fondos de las renovaciones se canalizarán hacia bonos del Tesoro. Por tanto, a partir de diciembre, el principal banco central del mundo adoptará una política neutral en cuanto a balance, algo que no ocurría desde finales de 2017.
Ebury: "la trayectoria ya no es tan previsible"
Ebury, la fintech global especializada en pagos internacionales e intercambio de divisas, explica que “los mercados acudieron a la reunión de la Fed esperando un discurso repetitivo y relativamente dovish, pero un par de sorpresas hawkish tomaron por sorpresa a los inversores. En primer lugar, llamó la atención el voto particular del presidente de la Fed de Kansas, Schmid, que se pronunció a favor de mantener los tipos intactos, lo que puso de relieve la considerable discrepancia que existe entre los miembros del comité, algo que posteriormente subrayó Powell".
En un contexto en el que la economía envía señales contradictorias, los datos son escasos y el entorno es incierto, la unanimidad en las votaciones del comité parece ser cosa del pasado.
El recorte de 25 puntos básicos (pb) de la Fed en diciembre se daba por hecho. Sin embargo, el comentario que realizó el presidente Powell de que no nada garantiza que se produzca otra bajada en diciembre causó un gran revuelo y provocó que el EUR/USD cayera por debajo de la cota de 1,16. Aunque los mercados siguen inclinándose por otro recorte antes de que acabe el año, ahora ya no parece tan evidente que se vaya a producir. La trayectoria de los tipos de interés ya no parece tan predecible como antes de la reunión.
"Seguimos apostando firmemente por un recorte en diciembre, a menos que los datos que se publiquen en el ínterin aconsejen lo contrario, suponiendo que para entonces dispongamos de algunos”, señala.
Fidelity: recorte adicional antes de fin de año
Max Stainton, Estratega Senior de Macroeconomía Global en Fidelity International: la Fed ha recortado tipos en 25 pb, como se esperaba, situando el rango objetivo de los fondos federales en el 3,75%-4%. El comunicado que acompaña la decisión reitera la preocupación por la evolución del mercado laboral, señalando que “los riesgos para el empleo han aumentado en los últimos meses”, mientras que mantiene un lenguaje más moderado respecto a la inflación, calificándola únicamente como “ligeramente elevada”.
Esta orientación acomodaticia (o dovish) se ha visto reforzada por el anuncio de un fin anticipado del endurecimiento cuantitativo (Quantitative Tightening o QT, en inglés), que ahora está previsto para el 1 de diciembre. Aunque la mayoría de los analistas esperaban este anuncio en la reunión del FOMC de diciembre, las recientes tensiones en los mercados de financiación parecen haber inquietado al Comité ante la posibilidad de una mayor volatilidad en los tipos de interés, provocada por una ligera escasez de reservas.
En conjunto, esto sigue evidenciando el giro de la Fed hacia una mayor atención a la evolución del empleo. Sin embargo, en la rueda de prensa, el presidente Jerome Powell ha matizado parte de este mensaje dovish, afirmando que un recorte de tipos en diciembre está “lejos de ser una conclusión inevitable”, lo que ha sacudido a los mercados, que ya descontaban plenamente una nueva bajada. Powell también ha destacado las dos disensiones en la decisión —en ambos sentidos— como prueba de que el Comité “no sigue un rumbo preestablecido”.
Ha reforzado este tono más agresivo (o hawkish) al sugerir que la incertidumbre de los datos, derivada del cierre parcial del gobierno, podría justificar ser cautelosos respecto a un recorte en diciembre.
De cara al futuro, a pesar de la insistencia de Powell en que la falta de datos podría traducirse en prudencia ante nuevos recortes, "esperamos que esta escasez de información se traduzca en una postura más dovish. La menor disponibilidad de datos no solo oculta los efectos de los despidos previos realizados por el DOGE, sino que también empezará a generar impactos negativos en el crecimiento a medida que se prolongue. Por ello, prevemos un recorte adicional antes de fin de año, en línea con esta dinámica y con la preferencia revelada por una postura más acomodaticia, evidenciada en el fin anticipado del QT".
Goldman Sachs: el fin del QT no dice mucho sobre la trayectoria de los tipos
Alexandra Wilson-Elizondo, Global Co-CIO de Multi-Asset Solutions en Goldman Sachs Asset Management:"Powell ha hecho énfasis en la dependencia de los datos en 12 discursos únicos en 2025. Poner la política en piloto automático, siguiendo la trayectoria marcada por el “dot plot” (gráfico de proyecciones), a menos que nuevos datos fiables cambien el panorama. Una única publicación de inflación moderada, unas expectativas bien ancladas y señales anecdóticas de enfriamiento respaldan una postura cautelosa hacia la bajada de tipos. Si las condiciones se mantienen, es probable otro recorte de 25 pb en la reunión de diciembre. El fin del ajuste cuantitativo afecta principalmente a la estructura de reservas y al funcionamiento del mercado monetario, y no dice mucho sobre la trayectoria futura de los tipos de interés oficiales. El rango objetivo de los fondos federales sigue siendo la herramienta principal para ajustar las condiciones financieras".
Creand: Powell reafirma la independencia de la Fed
David Macià Pérez, Director de Inversiones y Estrategia de Mercados de Creand Asset Management en Andorra: la Fed rebajó los tipos de interés en un cuarto de punto, a la vez que anunció el fin del Quantitative Tightening (QT). Nada de lo anterior tuvo mucho impacto en los mercados, ya que era exactamente lo que se anticipaba que iba a pasar. Dos votos disidentes, uno que pensaba que el recorte de tipos no era oportuno, y el de Stephen Miran, que hubiera querido una bajada de medio punto. Tampoco lo anterior tiene mayor importancia, sobre todo el de este último, porque compagina cargo con otro en la Casa Blanca.
Lo único que sí tuvo incidencia en los mercados fue cuando Powell señaló en la rueda de prensa que el recorte que los inversores dan sentado para la reunión de diciembre no era para nada algo seguro. Tal vez fuera por la falta de visibilidad, ante la ausencia de datos macro – el gobierno americano sigue cerrado y la mayoría no se calculan. O por tratar de reafirmar la independencia del organismo, ante las presiones de Trump. Es buena noticia que los candidatos a sustituir a Powell, al que le queden 6 meses en el cargo, no se alineasen con Miran.
DWS: las expectativas de recortes son demasiado optimistas
Christian Scherrmann, Economista jefe de DWS para EEUU: como se esperaba, la Fed redujo las tasas de interés en 25 pb en la reunión de octubre del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés). También se decidió detener la reducción de sus tenencias de valores en diciembre, para equilibrar mejor su cartera. La única sorpresa fue que hubo dos disidentes, en lugar de uno. Se esperaba que Stephen Miran votara a favor de un recorte de 50 pb. Sin embargo, Jeffrey Schmid adoptó una postura agresiva y votó en contra de cualquier cambio. Esto refuerza la idea de que los banqueros centrales están cada vez menos de acuerdo sobre cómo debería evolucionar la política monetaria. Esta idea ya estaba implícita en el gráfico de puntos casi dividido y en los diversos comentarios de la Fed, pero la disidencia agresiva le da más peso.
Esa erosión continua del consenso entre los miembros del FOMC probablemente se deba, en buena parte, al cierre del gobierno, que limita la disponibilidad de datos económicos, especialmente los relacionados con la inflación. La declaración refleja esto, ya que la mayoría de las referencias a datos son retrospectivas.
"Si bien estamos de acuerdo en que los datos disponibles respaldan la opinión de que los mercados laborales y la inflación no han mejorado repentinamente, de acuerdo con el doble mandato de la Reserva Federal, el riesgo de sorpresas en ambos frentes ya ha aumentado. Además, basándose en un ligero cambio en el lenguaje, la Reserva Federal probablemente espera un crecimiento ligeramente mayor, lo que podría impactar positivamente en el empleo. Sin embargo, esto es difícil de conciliar con el impacto negativo que probablemente tendrá el cierre del gobierno sobre el crecimiento y la contratación en el corto plazo", apunta este experto.
Durante la conferencia de prensa, el presidente de la Fed, Powell, reconoció las diferentes opiniones entre los miembros del FOMC. Mencionó que ha habido intensas discusiones sobre cómo proceder en diciembre y agregó que no se ha tomado una decisión, "ni mucho menos". Una vez más, el recorte se enmarcó como una decisión de gestión de riesgos, dado que pueden ser más profundos los asociados a los mercados laborales frente a los de la inflación, lo que podría cambiar de cara al futuro. Esto es un claro recordatorio a los mercados de que la Reserva Federal no sigue un rumbo preestablecido.
"En general, el resultado está en línea con nuestras expectativas. Mantenemos nuestro pronóstico de una Reserva Federal que recortará las tasas a un nivel neutral, alrededor del 3%, dentro de los próximos doce meses. Sin embargo, el momento de los recortes sigue siendo incierto y las expectativas de recortes consecutivos de las tasas por parte de la Fed probablemente sean demasiado optimistas, dadas las incertidumbres prevalecientes", concluye.